Hacer un pitch exitoso para una startup innovadora, especialmente cuando se trata de proyectos con impacto social o económico, implica mucho más que solo vender una idea. Necesitas conectar con tu audiencia, comunicar claramente tu visión y demostrar que tu proyecto no solo es viable, sino también sostenible en el largo plazo. Aquí te explicamos los puntos clave para estructurar un pitch efectivo.
El primer paso es identificar y comunicar claramente el problema o la necesidad que tu proyecto busca resolver. Este debe ser un desafío real que afecta a un grupo específico de personas o sectores. Más allá de describir un problema genérico, sé preciso. ¿A quién impacta? ¿Cómo lo hace?
Ejemplo:
“Los restaurantes de comida orgánica en ciudades no cuentan con recipientes biodegradables que refuercen su compromiso con la sostenibilidad, lo que afecta su imagen y coherencia operativa.”
Este tipo de planteamiento demuestra que entiendes el mercado y que tu solución responde a una necesidad concreta.
Tu propuesta debe destacar. No se trata solo de qué ofreces, sino de por qué es la mejor opción para resolver el problema. Este es el momento para explicar qué hace que tu solución sea innovadora y cómo contribuye a un cambio social o económico.
Ejemplo:
“Desarrollamos envases biodegradables específicamente para restaurantes orgánicos, ayudando a alinear sus prácticas con sus valores y mejorando su propuesta de valor frente a clientes que priorizan la sostenibilidad.”
Recuerda, no solo presentes una solución funcional; vincúlala con su impacto positivo en la comunidad o el sector.
Los inversores y jurados no solo apuestan por ideas, sino por las personas que están detrás de ellas. Dedica un momento a mostrar quiénes conforman tu equipo, qué experiencia tienen y por qué son las personas indicadas para llevar el proyecto al éxito. Es importante que los roles estén bien definidos y que haya una combinación de habilidades complementarias.
Ejemplo:
“Nuestro equipo está formado por Juan Pérez, CTO y experto en materiales biodegradables con más de 10 años de experiencia en desarrollo de productos ecológicos, y Rosa Palma, CEO y especialista en ventas con 5 años de experiencia en la comercialización de productos sostenibles.”
Un equipo sólido es clave para generar confianza en tu capacidad de ejecución.
El tamaño de mercado no es solo una cifra; es una demostración de la viabilidad de tu solución. Aquí es crucial que expliques el tamaño de tu mercado utilizando las métricas TAM (Total Addressable Market), SAM (Serviceable Available Market) y SOM (Serviceable Obtainable Market), pero con un enfoque más allá del simple potencial económico. Resalta la oportunidad de impacto social o ecológico y cómo tu proyecto puede ser sostenible, aunque no se enfoque en maximizar ganancias.
Ejemplo:
“Atendemos actualmente a 400 restaurantes locales, lo que representa US$ 400 mil en ventas anuales. En el mercado nacional, estimamos un TAM de 100 mil restaurantes orgánicos que generan un potencial de US$ 100 millones, con la oportunidad de expandirnos a Latinoamérica, donde el mercado es de 90 millones de clientes.”
Enfatiza cómo tu proyecto puede crecer de manera sostenible, sin perder de vista su impacto más amplio en el mercado y en la sociedad.
Aunque no todos los proyectos necesitan convertirse en grandes empresas de venta masiva, sí es fundamental demostrar cómo planeas mantener la sostenibilidad de tu startup. Aquí no se trata solo de ventas o proyecciones económicas, sino de cómo el proyecto logrará mantenerse y crecer en el tiempo. Explica los hitos clave que alcanzarás y cuánto financiamiento necesitas para lograrlos.
Ejemplo:
“En los próximos tres años, proyectamos expandirnos a nuevas ciudades y diversificar nuestros productos, logrando duplicar nuestras ventas. Solicitamos US$ 500 mil para mejorar nuestra tecnología de producción y ampliar nuestra red de distribución, garantizando que podamos alcanzar nuestras metas de sostenibilidad.”
En resumen, un buen pitch no se enfoca únicamente en la idea o en las cifras. Lo más importante es comunicar cómo tu proyecto responde a un problema real, qué lo hace único y cómo lograrás que sea sostenible, tanto en impacto social como económico. Recuerda que la claridad y el enfoque son clave para captar la atención de inversionistas y expertos del sector. Muestra progreso, destaca el potencial de impacto, y sé honesto sobre los recursos que necesitas para llevar tu proyecto al siguiente nivel.